“Some days you feel like the world is against you. And everyone around you seems so mean and ugly. There are times I just burn with hate. And those times I’m ugly too. I don’t want to hate, I want to be kind and awaken the kindness in others…”.
—Amy Jellicoe, Enlightened
Mi relación con Enlightened y la redacción de este comentario son atípicas: no es que recomiende esta nueva serie de HBO, es que quiero contarles por qué me resulta interesante de alguna forma, por qué vi sus 10 episodios emitidos y por qué espero la segunda temporada que hace unos minutos ha confirmado la HBO.
Mi relación con Laura Dern no es cualquier cosa: es una chica Lynch y, desde Corazón Salvaje ‒la vi antes que Terciopelo Azul‒ hasta Inland Empire, pasando por otras como la que todo el mundo recuerda, Parque Jurásico, y la fantástica Un Mundo Perfecto de mi amor Clint Eastwood, yo siempre le he tenido un especial cariño y admiración a esta actriz. Así que de entrada desmarquen la casilla de “es que Laura Dern me cae mal” como razón para no darle al menos 3 episodios a la serie. Pero hay otro dato muy importante en su carrera que hace que me parcialice aún más a su favor: encarnó en 1997, en la serie Ellen (la de DeGeneres), a Susan, la encantadora rubia por la que se siente atraída la protagonista y por quien descubre que es lesbiana; escenas de sofá y aeropuerto, más o menos, yo terminé de flecharme.